Fundada en 1916 en Parma, la empresa Acqua di Parma comenzó ofreciendo un Agua de Colonia destinada a perfumar los pañuelos de los hombres elegantes, que desde los años 30 se ha convertido en un verdadero símbolo de la elegancia italiana. Su éxito ha contribuido al desarrollo internacional de la marca, especialmente en Estados Unidos.
Llevada desde los años 50 por estrellas como Humphrey Bogart, Cary Grant o Ava Gardner, la «Colonia» cuenta hoy en día con una clientela fiel que incluye a Kevin Costner, Woody Allen y Sharon Stone, y que en 1993 fue adquirida por Diego Della Valle, Luca Di Montezemolo y Paolo Borgomanero, respectivamente fundadores o directores generales de Tod’s, Ferrari y La Perla. Los tres compradores se comprometieron a ampliar la gama Acqua di Parma creando nuevas líneas: Fragancia para el hogar (ollas-pourris, incienso, velas…), Colección Hogar (ropa de hogar), Colección Viajes (accesorios de piel), así como Blu Mediterraneo, una línea de aromaterapia.
En busca de un nuevo socio que aportara la financiación y los conocimientos necesarios para desarrollar la marca a nivel internacional, encontraron al socio ideal en LVMH. En octubre de 2001, el Grupo adquirió el 50% del capital de Acqua di Parma y se le confió a Parfums Christian Dior la licencia de los perfumes de la empresa italiana, que ahora tiene su sede en Milán y cuenta con una red de distribución muy exclusiva con alrededor de 900 puntos de venta en todo el mundo, incluyendo su propia boutique en Milán y rincones de grandes almacenes, y está planeando el despliegue progresivo de las boutiques en las principales ciudades capitales.
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